Una charla a través del océano con Felicitas Fernández, autora de El alma en blanco, la novela que te atrapa desde las primeras páginas y que no podés dejar de leer. Es la historia de una mujer, tan cercana que hasta podría ser tu amiga. “Me gusta contar historias de mujeres comunes, de los caminos hacia el autoconocimiento, los cambios, las dudas y los obstáculos que te depara la vida”, dice Felicitas.

Cae la tarde en Cascais, en las afueras de Lisboa y es plena siesta en Córdoba. Aquí transcurren los últimos días de verano, allá se asoma la primavera y los ansiados días de sol, tan luminosos en la Península.
Felicitas hace tres años que vive en Portugal, pero casi 15 que está fuera del país, junto a su familia vivieron en Estados Unidos, Venezuela e Inglaterra. En ese tiempo, y mientras ejercía en el campo de los Recursos Humanos -ella es abogada- nacieron sus hijos, Benjamín y Camila. Y también, El alma en blanco. Esta primera novela es un proyecto y deseo -que se lo percibe muy interno- fruto de un sueño y de hacerle lugar en una agenda súper ajustada- a los talleres de escritura creativa que tomó en distintas universidades y editoriales. Me gusta la dedicatoria de El Alma … “A todos los que, de alguna forma u otra, creyeron en mí”.

Felicitas Fernández, con su primera novela El alma en blanco.

¿Cuándo nace tu deseo de convertirte en escritora?
Cuando era chica escribía poesía y en mi imaginación siempre estoy viviendo una historia, lo que me faltaba era el hábito de pasar las historias a escritura, de sentarme a escribir. De hecho, me planteé estudiar Literatura o Filosofía y Letras pero terminé estudiando Abogacía, no visualicé la escritura -y quizás ese haya sido el error más grande- como una profesión. Para mí empezó siendo un hobby y nunca le había dado ni el tiempo, ni la atención, ni el esfuerzo que requiere. La escritura siempre terminaba postergada por las obligaciones. Ahora, el contar historias, participar de concursos, y generar relatos cortos, es algo que me llena de placer. Me gusta contar historias de mujeres comunes, de los cambios y caminos de autoconocimiento, las dudas, los obstáculos.

¿Cómo surge el título?
El título me llegó mucho antes que la novela y lo que quería transmitir es eso de poder recomenzar, reescribir tu propia historia, un nuevo comienzo, haciendo un paralelo con una página en blanco, permitirse eso: una etapa terminó y puedo empezar una nueva, tomar las riendas de tu vida.

El alma en blanco tiene como protagonista a Malena, una joven argentina que vive en Boston con su marido pero que añora estar cerca de sus afectos en Buenos Aires. Y un día, vuelve, pero volver a casa, no siempre es como lo soñamos.

Cada capítulo comienza con el fragmento de un tango ¿Te gusta, empezaste cuando te fuiste a vivir afuera?
Nunca fui muy tanguera pero sí hay canciones que han crecido conmigo, Malena es una y el nombre de la protagonista de la novela vino por ahí, “Malena, con esa pena tan grande …”. También Naranjo en flor y Volver, que desde que me fui de Argentina tiene un peso emocional muy fuerte. Creo que influye la añoranza: cuando uno está afuera conecta mucho más fuerte con las cosas de su propia tierra. Los portugueses tienen un término que según dicen no tiene traducción, y es “saudades”. Una mezcla de añoranza, melancolía y apego, todo en una sola palabra. Es parte de la cultura e identidad portuguesas y se siente también en el Fado, su música tan típica. Creo que la vida me trajo a Portugal para ayudarme a entender ese sentimiento tan profundo que siento por mi país, Argentina… esas eternas “saudades” de mi tierra que creo que se reflejan en mi escritura, en todo lo que yo añoro de Buenos Aires, del sur, de la gente y es algo que hay en común entre Malena y yo.

En la novela surgen temas fuertes como un embarazo no deseado, la adicción al alcohol, una enfermedad hereditaria, ¿Fue complejo tratarlos?
Cuando estaba escribiendo, fueron saliendo todos estos temas sensibles y los personajes fueron imponiéndose, cada uno con su historia. La intención no era que el libro tomara un punto de vista, sino mostrar que esos temas son parte de la vida. En el caso de Malena, sentí que sus decisiones tenían que ser coherentes con su confusión, su dolor, su revolución interna. Yo creo que es en la adversidad, ahí cuando nuestros planes se tuercen, donde una realmente se conoce a sí misma. Y en momentos de desesperación, una puede reaccionar de una manera que nunca se hubiese imaginado. Por eso creo que es importante aprender a no juzgarnos y no juzgar a los demás.

El libro fue editado e impreso en España, pero está en múltiples plataformas digitales, ¿dónde lo encontramos y cuál es la devolución de las lectoras?
En España está disponible en Amazon, Casa del Libro y El Corte Inglés. En Argentina por el momento sólo está en versión digital y estamos trabajando para que prontito este en las librerías. La recepción entre las lectoras ha sido muy positiva: la encuentran amena y entretenida y eso es muy halagador. Me alienta a seguir escribiendo. Me gusta observar que, entre mis más allegadas, cada una pone el foco en un personaje diferente, seguramente conectada con su propia realidad.

¿Estás trabajando en un nuevo libro?
Muchas lectoras me han pedido la segunda parte pero actualmente estoy trabajando en una nueva historia así que quizás un poco más adelante…en 2022 nos volvamos a encontrar con Malena.
Dicen que hay dos tipos de escritoras, con mapa y con brújula. Yo soy de “las con brújula”. No diseño toda la historia y después la escribo, por el contrario, me centro en el personaje y luego su historia va surgiendo de a poco.
Me gusta describir los lugares que conozco. Me encantaría escribir una novela situada acá en Portugal que es tan hermoso ¡hay una arquitectura bellísima.. y está lleno de castillos!. Una historia cerca del mar…
A El alma … la escribí con la imaginación y me hubiese encantado volver a sentarme en la plaza de San Martín de los Andes y empaparme del lugar, pero justamente esas ganas tremendas de estar ahí (en Buenos Aires, o en San Martín de los Andes) es lo que me hacía volver a esos lugares añorados.
Escribir fue volver.
Uno idealiza tanto la vuelta, aunque volver a veces resulta más complicado que partir. Por lo menos, eso le pasó a Malena.

Una postal de Cascais, en las afueras de Lisboa, Portugal.
Foto IG @inside_cascais
Lisboa, la capital de Portugal.
Foto IG @juliopereiramusic

Ping Pong
Portugal: historia, el mar azul, pastel de nata y un paseo en tranvía
La familia: mi sostén
Inglaterra: un tramo difícil, cielos grises y garúa finita
Autoconocimiento: aprender a pausar y escucharme a mí misma
Argentina: saudades, un desgarro en el alma
Un tango: Naranjo en flor

El alma en blanco. Disponible en:
Amazon, Apple Books, GooglePLay y Bajalibros.com

Webs del libro:
https://www.amazon.co.uk/El-alma-blanco-Felicitas-Fernandez/dp/8418238321
https://www.bajalibros.com/AR/El-alma-en-blanco-Felicitas-Fernandez-eBook-1876502

Instagram de la obra:
@novelaelalmaenblanco